El duelo Ford-Chevrolet

El duelo Ford-Chevrolet en las estadísticas

A comienzos de la década del ’40, los hermanos Juan y Oscar Gálvez, con Ford, y Juan Manuel Fangio, con Chevrolet, encendieron la mecha de la férrea rivalidad de dos marcas antagónicas del Turismo Carretera, que hasta nuestros días se conserva intacta como el Boca-River del automovilismo.

Los fríos números de las estadísticas indican que Ford obtuvo 41 campeonatos y su archirrival Chevrolet, 23. Luego lo siguen Dodge con nueve coronas y Torino con cinco.

Juan Gálvez (Ford) fue el que más títulos ganó (nueve), por encima de Guillermo Ortelli (Chevrolet) con siete; y Juan María Traverso seis (tres con Ford y tres con Chevrolet), Oscar Gálvez cinco y Dante Emiliozzi cuatro.

El «Flaco» de Ramallo, Juan María Traverso, fue el único que ganó con las dos marcas emblemáticas.

En cuanto a carreras ganadas, Ford marcha adelante en las estadísticas con 610 triunfos y le siguen Chevrolet con 415, Dodge con 164 y Torino con 127, pero las dos últimas marcas su sumaron varias décadas después.

Juan Gálvez también marcha al frente en carreras ganadas con 56 y detrás se ubican Roberto Mouras, 50; Juan María Traverso, 46; Oscar Gálvez, 43; Dante Emiliozzi, 42; Omar Martínez, 33, Guillermo Ortelli, 32 y Héctor Luis Gradassi.

La historia de la fundación de la ACTC

La noche del 30 de agosto de 1960, un grupo de pilotos fundó la Asociación Corredores de Turismo Carretera (ACTC) como respuesta a una inconsulta determinación reglamentaria de la Comisión Deportiva Automovilística (CDA) del Automóvil Club Argentino (ACA), que por entonces regulaba la categoría.

El detonante fue que la CDA reglamentó la carga de combustible desde el exterior del auto a partir de las Mil Millas de ese año, lo que motivó el nacimiento de la nueva organización en la sede de la Asociación Argentina de Volantes (AAV), que hoy tiene como presidente a Juan María Traverso.

Los 62 pilotos presentes recibieron el apoyo del resto que, por cuestiones de distancia, no pudo asistir y aprobaron el borrador del estatuto que llevó el porteño Plinio Abel Rosetto a la presidencia con el propósito de «fomentar y patrocinar carreras, como asimismo con tribuir al beneficio de todos los participantes del TC».

La ACTC fijó su sede en 24 de Noviembre 1113, en el domicilio particular de Rosetto y, por unanimidad se le ofreció la presidencia a Juan Gálvez, pero el nuevo veces campeón de TC declinó el cargo, y entonces fue consagrado el anfitrión.

Como vicepresidente fue nominado el bonaerense de Las Flores, Ernesto Serafínién Scally; secretario resultó el bonaerense Rodolfo de Alzaga (campeón 1959); tesorero, el porteño Ernesto Petrini, y protesorero, el capitalino Juan Gálvez.

Rápidamente las empresas se sumaron para apoyar a la categoría: la concesionaria Alberto J. Armando S.A., la firma del expresidente de Boca Juniors; ANNAN ICSCA, Atma S.A, Acomet S.A, Suixtil S.A y Vianini Argentina S.A y la petrolera estatal YPF, que brindó la nafta y el aceite para la competencia.

A casi un año de su fundación, la ACTC emprendió la organización de su primera competencia, el 9 de julio de 1961 en el entonces Autódromo Municipal, que había sido inaugurado por el expresidente Juan Domingo Perón en 1952 con el nombre de «17 de Octubre».

De esa histórica gesta de la ACTC, tomaron parte, entre otros, Rodolfo de Alzaga, Segundo Alé, Daimo Bojanich, Oscar Cabalén, Manuel Cobas, Julio Castellani, Juan Carrica, Juan Devoto, Carlos Druetta, Juan Favuto, Pablo Fachini, Oscar Gálvez, Remo Gamalero, Carmelo Galbato, Raúl Jara, Manuel Mantinian, Juan Machado, Nelo Marsilli y Daniel Musso.

También largaron José Morán, Nicolás Nagel, Juan Carlos Navone, Angel Nomdedeu, Ernesto Petrini, Fernandio Piersanti, Ulises y Enrique Pourciel, Plinio Rosetto, Ramón Requejo, Santiago Luján Saigós y Críspulo Villanueva.

Con el tiempo, la ACTC trasladó su sede a la avenida Santa Fe 2716, donde funcionaba la agencia de autos del piloto Pablo Fachini, y después se mudó a la fábrica de acoplados La Helvética hasta recalar en su edificio actual de la calle Bogotá 166, en el barrio porteño de Caballito.

El 20 de mayo de 1979, la ACTC dio otro paso fundamental en su independencia, ya que decidió prescindir de la Confederación Argentina de Automovilismo Deportivo (CADAD), para proceder a su propia fiscalización de las carreras.

Ese mojón se produjo bajo la presidencia del bonarense Octavio Suárez, quien falleció en plenas funciones de su mandato, en un accidente en la Vuelta de Tandil, el 23 de septiembre de 1984.

Los presidentes de la ACTC a lo largo de sus 60 años fueron Plinio Abel Rosetto (60-61), Pablo Fachini (61-63), Eulogio Maquirrian (63-64), Armando J.Ríos (64-65), Rubén Roux (65-66), Carlos Menditeguy (66-67), Carlos Druetta (67-69), José Spada (69-71), Carlos Pairetti (71-74), Octavio Suárez (74-84), Juan Carlos Deambrosi (84-2001), Rubén Gil Bicella (2001-2002), Oscar Aventín (2002-2013) y Hugo Mazzacane (2013 hasta hoy).

Fuente: Télam